Definitivamente, ha llegado...
Calla. No digas nada. Tan sólo mírame. Mírame fijamente a los ojos y simplemente trata de adivinar en ellos todo lo que querría decirte...
En ese momento me gustaría cogerte de la mano. Me gustaría cogerte de la mano para posarla suavemente sobre mi pecho... y que así pudieses entender que sólo tu puedes hacer que este corazón bombee...
Aviso: Lo siento queridos lectores. Hay ocasiones en las que se nos da por despotricar contra el mundo, otras por romper cosas, otras por pasear pensativos, otra por reirnos o mirar hacia otro lado y, en otras, la expresión de los sentimientos puede convertirse en una vía de escape. Es como escribir en un pequeño pedacito de papel, esperando que algún día lo encuentres...
3 comentarios:
Vaya. Que el corazón bombee por alguien, que la vida se sienta viva por alguien. Ya se me había olvidado que eso era posible. Claro, podré sentirlo pero no hacer que alguien lo sienta por mí. De allí que pueda estar seguro que nadie me va a extrañar.
y yo siempre intentado que mi corazón aprenda a no depender de bombas externas..
Creo que no hay nada que disculpar.
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