Te perdono
Me miré al espejo fijamente. No podía apartar la mirada de mí. Aparentemente no había nada distinto. La misma cara. El mismo cuerpo...
Pero había algo en los ojos. Se distinguía tristeza, pero a la vez esperanza. Tristeza porque esto suponía una despedida. Nunca se me han dado bien. Pero estaba realmente apenado. En cierto modo no quiero que se vaya. Ha estado conmigo tanto tiempo que me da hasta pena. Me ha hecho ver muchas cosas de otra manera. Me ayudó a distinguir lo puro de lo que no lo es. Me ha enseñado. Pero también me está destruyendo. Y es hora de acabar con ello.
No volveré a ser el de antes. Pero tampoco seré el de ahora. Espero ser una simbiosis perfecta de ambos conjuntos. Aunque sé que no va a ser fácil. Sé que tendré que esforzarme para conseguirlo. Y esta vez nadie, excepto yo, puede atravesar esta línea.
2 comentarios:
puedo linkearte en mi blog?
Por supuesto, es todo un placer ;-)
Publicar un comentario