25 septiembre, 2006

Equilibrio

Te estás elevando demasiado. Estás construyendo un pilar demasiado delgado para sostenerte tan alto. No conoces lo crueles que pueden ser si saben que la caída será grande. Y algún día te tirarán. Y caerás de vuelta a la normalidad. Todo volverá a ser como antes. Aunque, la verdad espero que sea así, porque has cambiado demasiado. Pero cuidado. Reza a tu dios porque no se les ocurra hundirte aún más. Espero no verte por aquí abajo. Buscando un lugar entre los fracasados y los olvidados. Es difícil creer que puedes llegar hasta aquí, pero sólo lo sabes una vez que encuentras este lugar. Es difícil salir de un agujero tan profundo, si no tienes a nadie que te dé la mano y te ayude a salir. Aunque bueno, sabes que seré tan estúpido como para querer ayudarte a salir, aunque yo me hunda aún más. Dejaré que me chupes la sangre hasta que empiece a doler. Pensaré que una vez que estés fuera me ofrecerás tu mano para escapar. Y en cuanto estés fuera taparás este agujero para no volver a caer. Dejándome aquí olvidado.

Ten cuidado, porque algún día caerás.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hay veces que cuando te ofrecen esa mano, no hay que cogerla... ensuciarte poniendo tus manos en el suelo para levantarte... y saliendo del agujero por uno mismo... y no taparlo... para recordar donde estuvimos, y de dónde salimos... y lo hicimos solos...

No te rindas nunca...